UNA HISTORIA, PARA SER LEÍDA ANTES DE LA MEDIANOCHE

LA VENTANA QUE NUNCA ESTUVO, DONDE DEBÍA ESTAR juansantana86@gmail.com E l féretro con restos del viejo, estaba colocado justo en el centro de la habitación sin ventanas de la casona familiar y que había sido climatizada de manera adecuada para el velatorio como lo había pedido él mismo, hacía más de veinte años. Las cortinas, eran de crespón negro y ribetes dorados, escogidas por el finado, eran de una sobriedad espantosa. Una mesita de metal alta, con tope en mármol, ubicada en uno de los rincones, sostenía un jarrón de barro sin esculpir, con flores frescas, recién cortadas del jardín de la casa. Eran claveles blancos y tulipanes amarillos. Una cinta, del mismo color negro, del crespón de la tela de las cortinas, describía el aprecio por el fenecido: “A nuestro padre D. Margarito Granado y del Bosque; con cariño, de todos sus hijos”. El viejo, había tenido una vida larga y fructífera: una docena de hijos repartidos entre tres mujeres y sólo con la última de ellas estuvo legalmente c...