Más sobre los enfrentamientos entre choferes

POR JUAN SANTANA
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CDP-S21-151

Leyendo la prensa matutina, nos encontramos este viernes con dos coincidencias sobre un mismo tema: la guerra no declarada de sindicatos de choferes del transporte público de pasajeros que ya esta semana dejaron dos muertos, varios heridos y daños de consideración a la propiedad.

Listín Diario y El Caribe, editorializan hoy sobre el "pacto", al que llegaron este jueves grupos choferiles de la región Sur, luego de la muerte de un cobrador y un dirigente sindical en los enfrentamientos que llevan varias semanas ante la mirada indiferente y hasta permisiva de las autoridades, por el control de las rutas de esa parte del país.

"No bastaron las agresiones a autobuses y pasajeros. No bastaron las agresiones a la prensa, incluyendo reportero y fotógrafo de Diario Libre. No bastaron las imágenes de la barbarie que se vivió en la autopista. No. Tenían que morir dos de esos cuya vida aparentemente no vale nada, y tenían que salir heridos unos cuantos más, para que se firmara una tregua de sangre entre los choferes de las rutas del Sur", señala con claridad meridiana el editorialista de Diario Libre.

En ese sentido, El Caribe señala que "Sobre dos cadáveres y varios heridos y tras la destrucción de propiedades privadas y provocar un desorden mayúsculo en la vía pública, los choferes que se disputan el control de rutas hacia la región Sur de repente se han tornado tan  “razonables”, que ahora convienen en poner fin a la violencia.

Añade que "lo que en principio podría parecer un acto digno de encomio es en realidad un descaro y un insulto a la ley y el orden en una sociedad que debe basar su accionar en una coexistencia armónica entre sus ciudadanos".

Estamos de acuerdo, el hecho de dirigentes de sindicatos se hayan puesto de acuerdo para dizque poner fin a los enfrentamientos, de ninguna manera les debe exonerar de responsabilidad, en hechos que ya han dejado muertos, heridos y daños a la propiedad privada.

Las autoridades que tienen que velar por un transporte de calidad, seguro y en donde el ciudadano tenga el respeto que se merece, deben ponerse los pantalones ya, ahora mismo, y llevar a la acción de la justicia a esos malandrines, que por suerte son loa menos, que siembran violencia, con sus acciones diarias.

Desistir de la violencia no puede ser el resultado de un convenio, sobre todo después de cometer los citados desmanes, que constituyen actos delictivos y un abierto desafío a la autoridad y al ordenamiento jurídico de la nación", expone El Caribe y agrega que: "Los choferes que cometieron esos desafueros deben estar presos y procesados, conforme a las graves violaciones cometidas, que  no pueden estar sujetas a negociaciones de ningún tipo".

Diario Libre plantea algo más: que los sindicatos que han participado en estos desórdenes hace tiempo que debieron haber perdido su afiliación sindical y sus dirigentes debieron haber sido sometidos a la justicia por asociación de malhechores "porque esos muertos no se dieron en el vacío, sino en una vasta complicidad de muchos".

Que la sangre derramada, el luto y el dolor en que están sumidas las dos más recientes víctimas, originada por la sinrazón de los que mal dirigen los sindicatos choferiles no quede impune y se aplique todo el peso de las leyes a los responsables de actos que jamás deben repetirse. Esto es a lo que aspiramos los que miramos con estupor los hechos que a diario nos dan en la cara... hasta una próxima oportunidad.