Preocupante
POR JUAN SANTANA
juansantana86@gmail.com
CDP-S21-151
Preocupa y llama la atención el hecho de que en nuestro país, todo el mundo hace lo que le da la gana y nadie, ninguna autoridad se preocupa por hacer que las cosas anden como debe ser. El tema viene al caso pues a diario, a cualquier hora del día o de la noche, los medios de información nos "bombardean" con publicidad de productos milagrosos para acabar con el dolor, para eliminar las libras de más, evitar la eyaulación precoz, para restaurar el hígado dañado por el alcohol y las grasas y no se cuantas vainas más.
En la televisión pasan a cada instante el anuncio de un estimulante sexual (creo que así se llaman), en donde un ladronzuelo entra a robar a una casa y encuentra una pareja que duerme plácidamente luego de una no menos placentera jornada sexual. El ladrón, en este caso, observa lo que hay de robar en la habitación de la pareja y echa manos a las famosas pastillas "salvavidas" que estimulan la erección.
En los periódicos leemos a cada instante anuncios para combatir de manera eficaz el problema de eyaculación precoz que padecen tantos machos, varones masculinos en esta tierra. Decimos que lo padecen muchos machos, varones masculinos pues esta problemática se ha convertido en una fuente de divorcios y hasta de complejos en algunos congéneres.
Entiendo que el tema de los anuncios de medicamentos por televisión, prensa, radio y hasta por la Internet, debe manejarse con sumo cuidado ya que quienes más están expuestos a esos mensajes son nuestros jóvenes y sabemos de casos en algunas provincias del país, en donde los mayores consumidores de fármacos (sobre todo los que tiene que ver con el llamado aumento de la potencia sexual), son precisamente jóvenes de entre 16 y 25 años.
No es que no se deje de buscar ayuda cuando uno sienta que las facultades naturales del hombre empiecen a disminuir. Lo correcto es ponerse en manos de un médico, un profesional que le indique qué necesita y también le advierta de las contraindicaciones pues eso de estar consumiendo cosas por moda, es algo muy peligroso... hasta la próxima.
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