Los muertos de la Policía

POR JUAN SANTANA
juansantana86@gmail.com
(Miembro del Colegio Dominicano de Periodistas)
CDP-S21-151

“El sector de Cristo Rey, con justificada indignación, se ha lanzado a las calles a reclamar justicia en el caso de un joven evangélico muerto por agentes de la Policía el viernes en la madrugada de un balazo por la espalda”.

La narración y la escena de este hecho, parecen sacados de un noticiario de televisión que a diario vemos. Se ve cercano y actual. Sin embargo, hace once años que ocurrió y parece que fue ayer.

El joven evangélico, Gérson Núñez Arias, fue muerto de un balazo por la espalda que le hizo un agente de la Policía Nacional, la madrugada del viernes 24 de septiembre de 1999, en las cercanías de su casa.

El caso casi once años después se repite. Casi a diario leemos en los periódicos o vemos en a televisión que un joven dominicano cae abatido a tiros, a manos de agentes de la Policía.

Cuando no es en un "intercambio de disparos", la víctima cae al "enfrentarse" al no obedecer una orden de alto de las tropas policiales.

La mayoría de las víctimas son jóvenes que muy pocas veces pasan o llegan a los treinta años de edad, otros son estudiantes, unos más, son padres de familia provenientes de nuestros sectores humildes de la capital y procedentes de pueblos del interior.

Al igual que hace once años y desde que tenemos uso de razón, la Policía (mas bien un grupo de los llamados “gatillos alegres”), está utilizando la técnica del exterminio, diezmando la población joven dominicana.

Ya no existe seguridad cuando uno se encuentra con una patrulla de la Policía en la calle. Hay personas que al verlos acercarse se van por otro lado para ni siquiera coincidir con ellos.

Usted nunca se imagina si la Policía está para proteger o para matar. La verdad es que no existe la certeza de la seguridad en una sociedad que cada día se torna más y más violenta. Es tiempo ya de parar de una vez y por todas esta situación... antes que la sangre llegue al río.

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