Víctor Gómez casanova luce perdido

Me duele decirlo, pero parece ser que mi amigo Víctor Gómez Casanova está algo perdido. Su partida hacia el PRD (Partido Revolucionario Dominicano), no fue la desición más afortunada. Y que me responda, ahí, no hay cama para tanta gente.

No se si con esto que voy a decir te ofendo pero siento, percibo, que Víctor, a quien recuerdo de los tiempos de encargado de relaciones públicas de la secretaría de Industria y Comercio, en la gestión del licenciado Ángel Lockward y yo trabajando en el periódico El Nacional: no es el mismo que conocí.

Lo noto muy envalentonado, abriéndose muchos frentes como comunicador y como político y eso me preocupa de verdad. Recuerdo a mi amigo cuando tuvo aquel accidente en la autopista Duarte y estuvo recluido en un centro de salud privado de esta capital. Allí lo vi y entre bromas le dije cuidate mucho.

Celebré su ascenso a la secretaría general del Partido Reformista, vivo sus triunfos en los medios, me alegro mucho de sus logros; pero lo veo algo perdido: por qué, veamos: en su partido, sí tenía futuro, en el PRD es uno más y es más está arrimado, no tiene libertad de acción, o me equivoco. Su futuro estaba y creo que está más seguro en su partido el que debió seguir luchando por salvar.