Moderación al celebrar

A pocas horas de las festividades navideñas en la República Dominicana, es justo hacer un alto en el camino y analizar la causa de tantas muertes ocurridas en las últimas horas, de manera especifica, en accidentes de tránsito.

Ya son más de veinte los muertos en apenas 22 días que lleva el mes, lo que ha llenado de luto y dolor muchos hogares dominicanos.

Analizar las causas de la tragedia no es el caso ahora. Lo que si queremos es llamar desde aquí a todo el pueblo, a la celebración con moderación, pensar que el mundo no se va a acabar en apenas un par de días, que la vida como los ríos, debe seguir, que no seamos nosotros mismos, la causa de nuestra propia destrucción.

Cero imprudencia al conducir, hay que respetar las señales de tránsito y el derecho de los demás a transitar por las vías, respetemos a las autoridades, ellos están ahí para vigilar nuestra conducta y protegernos y recordemos una vez más: no ligar alcohol con con gasolina y sobre todo: si vamos a desplazarnos al interior a visitar parientes y amigos, hagamos ese viaje en las primeras horas de la mañana, bien descansados y sin la prisa que conduce a situaciones lamentables para todos.

Si la travesía será en un vehículo público, busquemos salir a tiempo para evitar la desesperación en las carreteras en las que cada pasajero comienza a gritar al chofer para que "acelere que estamos tarde".

Recuerden que la vida no tiene fotocopia y aunque prestada, debemos cuidarla.

No seamos un número más en las frías estadísticas de Navidad y Año Nuevo; cuidemos nuestra vida y la de los que dependen de nosotros y celebremos sin excesos y sin exageración; con mucha moderación para juntos seguir en la construcción de un mejor país para todos. ¡FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO 2009!