La vida no tiene fotocopia

La muerte a tiros de un joven de Bayaguana, tras las protestas escenificadas la semana pasada en esa localidad en contra de los apagones, llama a la reflexión. Wescel de la Cruz, de unos 20 años, murió el domingo luego de haber sido baleado, alegadamente por agentes de la Policía Nacional.

Es menester que sobre este caso y otros que se mantienen en el olvido, se realice una exhaustiva investigación para dar con el o los responsables de hechos condenables y repudiables desde todo punto de vista.

No es posible que en la República Dominicana, en pleno siglo XXI, sigan cayendo vidas jóvenes y mucho menos en esas condiciones. Es preciso que los efectivos de la Policía que ejercen represión de las manifestaciones que se dan a diario, tengan más pendiente la vida de un ser humano. Claro, ahora vendrán las justificaciones, las investigaciones y hasta las sanciones ejemplarizadoras pero ya Wescel de la Cruz está en la fosa y la vida, no tiene fotocopia...

Conmueve además, la trágica información dada a conocer este martes por el jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, de que un agente de esa institución, baleado también en una jornada de protestas en Navarrete, a Noroeste de la capital dominicana, murió. Antonio Joan Medina, es el nombre del agente muerto. ¡Hasta cuando!